Sarco, la máquina para el suicidio asistido que ya es legal en Suiza

Una empresa presentó en Suiza una cápsula de suicidio asistido, una especie de ataúd moderno, que recibió la aprobación legal para poder ser utilizado.

La cápsula permite a una persona controlar y activar el sistema y poder tener una muerte sin dolor en la que el paciente se duerme y muere rápidamente por la inhalación de nitrógeno.

En algunos países, la eutanasia tiene tiene validez legal, y Suiza es uno de los mejores ejemplos, aunque allí lo denominan “suicidio asistido”, que no es exactamente lo mismo.

El suicidio asistido se practica desde la década 40 en el país europeo. La ley lo respalda y el Tribunal Federal suizo estableció en 2006 que toda persona en uso de sus capacidades mentales (sin tomar en cuenta si eran o no enfermos terminales) tiene el derecho a decidir sobre su propia muerte.

Sarco es una cápsula impresa en 3D, con apariencia de ataúd con paneles transparentes, y se asienta sobre una plataforma elevada que se inclina en ángulo.

El paciente, al ingresar en ella, debe digitar un código –que previamente le fue enviado tras una evaluación psiquiátrica– que hará que el dispositivo comience a liberar nitrógeno. Ese gas adormecerá definitivamente a la persona, que podrá ser sepultada en la misma cápsula.

La idea es que se use con solo parpadear si la persona sufre de síndrome de enclaustramiento, y funciona a través de la reducción del nivel de oxígeno en la cápsula por debajo de un nivel crítico.

El proceso dura menos de un minuto y la muerte se produce por hipoxia e hipocapnia, lo que pretende permitir que una persona muera con paz y sin dolor, relativamente. El suicidio asistido es legal en Suiza y alrededor de 1.300 personas utilizaron los servicios de las organizaciones de eutanasia Dignitas y Exit el año pasado.

Ambas empresas emplean medicamentos barbitúricos líquidos ingeribles para inducir un coma profundo en dos a cinco minutos, seguido de la muerte.

La cápsula suicida es la creación del doctor. Philip Nitschke, apodado el “doctor muerte”, quien se desempeña como director de la organización sin fines de lucro Exit International.

El Sarco, que es una abreviatura de “sarcófago”, está diseñado para ser llevado a una ubicación de preferencia de los usuarios, como un entorno idílico al aire libre, y luego se puede desprender su cápsula biodegradable para servir como ataúd.

El doctor Nitschke enfrentó resistencia de los opositores a la eutanasia, en parte debido al método que utiliza.

“Es posible que el gas nunca sea un método aceptable para el suicidio asistido en Europa debido a las connotaciones negativas del Holocausto”, dijo el doctor Nitschke a The Independent en una entrevista de 2018. “Algunos incluso dicen que es solo una cámara de gas glorificada”.

También recibió críticas debido a su diseño futurista, que algunos manifiestan que hace atractivo al suicidio, así como una aplicación de realidad virtual correspondiente que permite a las personas “experimentar su propia muerte virtual”.

En estos momentos solo existen dos prototipos de Sarco, pero Exit International imprime a 3D una tercera máquina que esperan estará lista para operar en Suiza el próximo año.

El doctor Nitschke dijo a los medios locales que “no hay problemas legales en lo absoluto” y que se están llevando a cabo conversaciones con varios grupos en Suiza con la finalidad de proporcionarles la cápsula para el suicidio asistido”.

Una mujer demanda por 100.000 dólares a AstraZeneca en Argentina

Asegura que la vacuna le produjo el síndrome de Guillain-Barré.

Una mujer de 39 años demandó en Argentina a los fabricantes de AstraZeneca por un monto de 100 millones de pesos (unos 110.000 dólares) al asegurar que las tres dosis que recibió de esta vacuna le provocaron una enfermedad incapacitante, además de daños morales.

De esta forma, Flavia Ochoa se convirtió en la primera persona que acude a los tribunales de este país para exigir una reparación económica por parte del gigante farmacéutico anglo-sueco y del Estado argentino.

El caso ocurrió en la provincia de Córdoba, en donde la demandante afirmó que la vacuna le produjo el síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad que afecta el sistema inmunitario y que puede paralizar el cuerpo.

De acuerdo con su testimonio, sus problemas de salud comenzaron el 4 de enero de 2022, después de colocarse la vacuna AstraZeneca, ya que empezó a sentir calambres, se le aflojaron las piernas y al día siguiente ya ni siquiera se pudo levantar.

En las semanas siguientes, una médica le explicó que podrían ser efectos adversos de la vacuna y otros le recetaron fuertes calmantes para paliar el dolor. Su movilidad se redujo casi por completo.

Tratamiento

Comenzó entonces un largo tratamiento que incluyó radiografías, tomografías, punciones lumbares y análisis bioquímicos, hasta que le diagnosticaron formalmente el síndrome de Guillain-Barré con cuadriparesia.

Desde entonces sigue en rehabilitación, camina con andador y padece una extrema debilidad en las piernas, incontinencia, fuertes dolores en la espalda, rodillas, migrañas, mareos, náuseas y depresión. En enero del año pasado, le otorgaron el retiro por invalidez.

Junto con los tratamientos médicos postvacuna, Ochoa activó el camino judicial e interpuso una demanda en la que exige un pago de 110.000 dólares por concepto de incapacidad sobreviniente, fondo de reparación, proyecto de vida-pérdida, daño moral -suyo y de su pareja-, daño punitivo y daño emergente.

Ahora le tocará a los tribunales de Río Cuarto (Córdoba) decidir si la demanda avanza.

El caso se da a conocer luego de que AstraZeneca confirmara algunos efectos adversos de su vacuna y anunciara que ya comenzó a retirarla del mercado debido a la baja demanda.

Paraguayos con órdenes de captura en Brasil, por ‘tráfico masivo’ de coca y marihuana

La Policía Federal del Brasil confirmó la existencia de órdenes de captura contra ciudadanos (entre ellos paraguayos) implicados en tráfico de drogas a escala masiva.

En la lista figura el conocido Antonio Joaquim Mendes Goncalves da Mota, alias Motinha, brasileño que había huido de un operativo que se llevó a cabo en el departamento de Amambay.

La disposición de búsqueda de los acusados por narcotráfico, menciona con énfasis el tráfico de marihuana y cocaína desde Paraguay, que se convirtió en los últimos años en un “pasillo” de triangulación del estupefaciente químico proveniente de Bolivia.

Con intercepción de llamadas y mensajes, autoridades del vecino país accedieron a evidencias que incriminan a paraguayos en esquemas binacionales para traficar estupefacientes al Brasil, considerado como uno de los mercados grandes de destino de las drogas.

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En el caso referente a alias Motinha, los informes relevados por la Policía Federal, consignan que el mismo es considerado un pez gordo que opera principalmente desde la zona fronteriza paraguayo-brasileña.

El sujeto alternaba residencias entre ambos países, y el año pasado logró romper un cerco de operativo llevado a cabo por la Secretaria Nacional Antidrogas y de la Policía. La acción se llevó a cabo en una de sus estancias ubicadas en Amambay, pero el resultado fue negativo, tras presuntas filtraciones que se verificó desde los entes en cuestión.

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Un escolar de 10 años se suicida tras ser víctima de ‘bullying’

El menor recibía burlas constantes de sus compañeros de escuela por sus gafas y dientes. Fue golpeado en el autobús escolar, acorralado en los baños del colegio y acosado en las redes sociales.

Este martes por la mañana una emotiva procesión de casi 200 personas se dirigió a la iglesia Brandywine en Greenfield (Indiana, EE.UU.) para rendirle tributo a un niño de 10 años quien se suicidó después de sufrir un acoso escolar implacable, recogieron medios locales. Su funeral se llevó a cabo en la mañana de este miércoles.

Sammy Teusch se suicidó el pasado 5 de mayo por la mañana, según el medio local 13News. “Lo sostuve en mis brazos. Hice lo que ningún padre debería hacer, y cada vez que cierro los ojos, es todo lo que puedo ver”, comentó su padre, Sam Teusch. “Él era mi hijo pequeño. Era mi bebé. Era el más pequeño”, dijo la madre de Sammy, Nichole Teusch.

Acosado hasta la muerte

Según su familia el niño estuvo siendo intimidado hasta la noche antes de su muerte. También dijeron que el acoso comenzó el año pasado en la escuela primaria y continuó este año en la Escuela Intermedia Greenfield. “Al principio se burlaban de él por sus gafas y luego de sus dientes. Esto continuó durante mucho tiempo”, expuso Sam. Lo que empezó como palabras progresivamente se volvió físico, subrayaron. “Lo golpearon en el autobús escolar y los niños le rompieron las gafas y todo”, expuso su padre.

La familia de Sammy explicó también que el acoso progresó desde la escuela y el autobús hasta las redes sociales, incluso a pesar de que él tenía acceso limitado a su teléfono. “‘Te voy a dar una paliza. Te voy a dar una paliza cuando llegues a la escuela’”, recordó Sam. Sus padres dijeron que debido al acoso el niño se volvió retraído y dejó de abrirse. Ellos consideran que su suicidio se debió a que temía ir a la escuela después de un incidente en el baño y el ‘bullying’ constante.

La escuela

Los padres de Sammy Teusch dijeron que se comunicaron con la escuela de su hijo 20 veces por acoso e intimidación. “Llamé a la escuela y les dije: ‘¿Qué están haciendo al respecto? Sigue empeorando, empeorando y empeorando. Y no está mejorando. De hecho, está empeorando’”, comentó su padre. “Sabían que esto estaba pasando”, afirma Sam.

El superintendente de escuelas, Harold Olin, señaló a 13News que ni los padres ni el estudiante presentaron ningún informe de acoso. Sin embargo, admitió que los administradores y el consejero de la escuela tuvieron conversaciones regulares con la familia durante todo el año, aunque indicó que no podía compartir su contenido.